lunes, 21 de octubre de 2019

N'Djamena, la capital

El avión de la compañía aerea marroquí aterrizó en el aeropuerto de N'Djamena  (o Yamena) a las 04:50, la hora prevista, fiel a su puntualidad y calidad de servicio; siempre me ha gustado volar con la Royal Air Maroc.
Tras pasar el escueto control policial con la toma de huellas dactilares y sello del visado en el pasaporte -no superábamos la veintena de pasajeros-, recogí en la cinta la mochila y me dirigí a la zona de parking del aeropuerto.
Era un poco más de las 5 de la mañana y como ya me esperaba no se encontraba Nathan, el encargado de mantenimiento del hotel Le Pilotis donde había reservado por Internet una habitación como uno de los requisitos indispensable para pedir el visado en la embajada de la República de Chad en París. Casi una hora más tarde apareció en un destartalado taxi, no sin antes haber sido acosado por varios de los cambistas situados en el parking del aeropuerto (el cambio es peor que en las oficinas oficiales de cambio, o de los cambistas que se amontonan en el Grand Marché y que dan 715 Cfa/1€).
El trayecto hacia el hotel, amaneciendo, y con muy poca iluminación callejera, daba idea de qué me iba a encontrar más tarde a plena luz del día.
El hotel Le Pilotis (40.000Cfa. en Booking/ climatizado, cama doble, cocina, salón) se encuentra en el barrio Paris-Congo, entre callejuelas de tierra, a 5min. en moto del centro -o zona comercial- que no es otra cosa que pequeñas tiendas bajo vetustos edificios y puestos de ventas cochambrosos. Típicas escenas de cualquier ciudad africana.
Mucha polvareda debido a la tierra acumulada en las calles, calor, continuo movimiento de vehículos y moto-taxis (clandos) como medio de transporte más rápido. Y viejos mini-buses con cantidad de trastos en el techo. Son los vehículos para acceder a poblaciones lejanas.
Los hoteles en N'Djamena son ridículamente caros. Ante todo prima la seguridad en todos los sentidos y eso hay que pagarlo. Aunque en cualquier conversación vecinal aparece comentarios sobre el mal que ha estado haciendo el grupo de mercenarios Boko Haram en este país y su gente, que no los quiere. Los odian. Lo califican como infieles del Islam. Asesinos sin piedad.
He tenido que ir a informar de mi llegada a la policía de inmigración por ser requisito indispensable (dan 72h. para realizarlo) para poder visitar la ciudad y no tener problemas con otros policía en algún control. Rellenar una hoja, 1 foto y la fuerza máxima de lucha para no ser parte de la extrema corrupción de los funcionarios de este país (herencia francesa) ya que es un servicio gratuito, pero ya el pedir dinero se ha hecho común a casi todo los actos administrativos. Primeramente me pidieron 10.000Cfa. y terminé pagando 5.000Cfa., sin remedio!.
Para colmo, horas más tarde, observo que me han sellado la fecha de Visto al Pasar un día antes de la llegada. Espero que no haya problema con ese error. A pesar que siempre compruebo los sellos, esta vez me la colaron. Tendré que volver a ir para que me lo solucionen. No quiero verme dando explicaciones en cualquiera de los controles que tenga que pasar.
Cambié euros en una oficina de cambio y entré en la agencia de viajes Gold Voyage, donde trabaja Moustapha, a preguntar sobre la posibilidad de visitar o quedarme a dormir en el Lago Chad. La segunda opción no es tan segura así que me confirmó que de momento sí se podría pernoctar alrededor del lago. Me puso en contacto con Guini un amigo suyo que es guía profesional muy conocido en Yamena y en menos de dos horas ya había llegado a un acuerdo y decidido la estancia cerca del lago de 3 noches, un coche 4x4, hotel, pagos imprevistos, permisos y traductor, menos almuerzos, cenas y bebidas que lo haríamos a medias). Lo único que busco, ante la falta de información actualizada, es mi seguridad. La seguridad de viajar por esta zona sin presión, sin imprevistos, sin sustos. ¿Y qué precio tiene la seguridad cuando no hay información clara de cómo se encuentra esa parte de Africa.
Viajaríamos con mucha seguridad, en un Land Cruiser en aparente buen estado.
Hace tiempo que no vienen turistas a esta zona del país. Las informaciones tan impactantes de los medios de comunicación ha echado atrás a casi todos los turistas que viajan por esta parte de Africa. Es necesario informarse bien antes de venir aquí y de momento éste es el ideal para disfrutar de la paz que se está viviendo en Chad. El ejército chadiano ha sido de los mejores de esta zona africana en actuar contra el grupo terrorista nigeriano y lo ha pagado con actos vandálicos contra sus ciudadanos como represalia. Bombas, asesinatos, violaciones... Pero esa es otra historia!
Tuve que ir personalmente al Ministerio del Interior a pedir un permiso de visita a la provincia Hadjer Lamisdonde se encuentra el Lago Chad. Aunque la tramitación se lleva a cabo en varios días, Guini y Moustapha moverían contactos para agilizar el trámite y recibirlo esa misma tarde, y que costaría un "extra" por la inmediatez. Sí, aquí todo se compra. O se paga!
En fin, este día no he podido realizar ninguna visita a la ciudad ni pasar por la embajada camerunesa en busca del visado de entrada que necesitaré para la próxima semana. Lo tendré que hacer a la vuelta.
Al caer la noche, una cena ligera en un restaurante local donde ponen mesas en la acera de la calle, porque en su interior hace mucho calor, y luego una cerveza en uno de los bares de encuentro de los chadianos, con la música a tan alto volumen que apenas posibilita las conversaciones.
Chad es un país mayoritariamente musulmán pero no se sigue las normas del "buen musulmán", es decir se fuma y se bebe en exceso, principalmente cervezas, que son de buena calidad. Aquí nadie mira mal a quienes sentados en las terrazas, observando el movimiento callejero, tienen sus mesas llenas de botellas.
Y yo quiero disfrutar de esos momentos!.